El único blog que admite de antemano que está de güeva.

Ahora patrocinado por Jarabe El Chorrito, "¡Es bueno el cabrón!"

martes, 30 de diciembre de 2008

Y la rola de hoy es: Unworthy Of Your Love

Esta belleza fue compuesta por Stephen Sondheim para el musical llamado Assassins, y posiblemente sea la canción de amor más chingona jamás escrita.
En cierta parte de la obra, dos jóvenes, un hombre y una mujer, cantan en dueto Unworthy Of Your Love. Lo más hermoso de la canción es que se aleja de lo cotidiano por varias cosas.
Primero: no es una canción de amor ñoña. La letra es bastante fuerte.
Segundo: los muchachos no se están cantando entre ellos, como usualmente suele suceder, sino que cantan en dueto a sus respectivos amores.
Tercero: es una canción de amor loco; él le canta a Jodie Foster, pues se ha enamorado de ella en su papel de Taxi Driver; ella le canta a Charles Manson. ¿Quihubo?
Cuarto: ¿Mencioné que el musical se llama Assassins?

Aquí les va la letra:

[HINCKLEY]
I am nothing,
You are wind and water and sky,
Jodie.
Tell me, Jodie,
How I can earn you love.
I would swim oceans,
I would move mountains,
I would do anything for you.
What do you want me to do?

I am unworthy of your love,
Jodie, Jodie,
Let me prove worthy of you love.
Tell me how I can earn your love,
Set me free.
How can I turn your love
To me?


[FROMME]
I am nothing,
You are wind and devil and God,
Charlie,
Take my blood and my body
For your love.
Let me feel fire,
Let me drink poison,
Tell me to tear my heart in two,
If that's what you want me to do...

I am unworthy of you love,
Charlie darlin',
I have done nothing for your love.
Let me be worthy of your love,
Set me free-


[HINCKLEY]
I would come take you from you life...

[FROMME]
I would some take you from your cell...

[HINCKLEY]
You would be queen to me, not wife...

[FROMME]
I would crawl belly deep through hell...

[HINCKLEY]
Baby, I'd die for you...

[FROMME]
Baby, I'd die for you...

[HINCKLEY]
Even though-

[FROMME]
Even though-

[HINCKLEY]
I will always know:

[FROMME]
I will always know:

[HINCKLEY]
I am unworthy of

[FROMME]
I am unworthy of

[HINCKLEY]
Your love,

[FROMME]
Your love,

[HINCKLEY]
Jodie darlin',

[FROMME]
Charlie darlin',

[BOTH]
Let me worthy of your love.
I'll find a way to earn your love,
Wait and see.
Then you will turn your love to me,
Your love to me...


Y un video donde dos tipos la cantan bien bonito:

Del "¡Ni merga!" y de los pequeños mamíferos dramáticos

Seguramente éste ya lo vieron, pero nunca está de más verlo otra vez. Serán los nueve segundos más divertidos de su día.

Les Luthiers: Daniel y el Señor

He aquí un gran video, el cual contiene la primera parte de la obra titulada Daniel y el Señor, escrita por Les Luthiers. Son unos chingones. Disfrutad:



Y aquí, la segunda parte:

sábado, 27 de diciembre de 2008

Volví

He regresado de mis vacaciones navideñas.
No pasó nada.
Nada.
Lo juro: nada.
Lo más interesante que ví fue una gallina a la que le tienen que ponerle gel para que su penacho la deje ver.
Y ya.
Bueno..., como ocurre cada vez que salgo de la ciudad, lo mejor es el regreso. Ver el D.F. desde lejos, adentro del autobús es... curioso. A más de un kilómetro de distancia y sin anteojos, la ciudad de México parece un lugar bonito, me atrevería a decir que hasta civilizado. Cuando te acercas, el Distrito te muestra su verdadero rostro; gente con cara de pocos amigos, calles sucias, cielo gris, ambiente hostil...
Diablos, ¡es tan hermoso!
Por un momento temí que, en mi ausencia, la ciudad se hubiera vuelto un buen lugar para vivir. Resultó sumamente grato para mí verla tal y como la dejé, tres días atrás. Como todo habitante de esta urbe, tengo una relación de amor/odio, miedo/respeto con ella. Es como la mujer hermosa que tanto adoras, pero sabes que es una culera que nunca te hará caso y no le hablas.
Y sin embargo, no puedes evitar sonreir al verla.
Me bajé del autobús como el Papa: besando el piso. No es que ame TANTO a la ciudad..., es sólo que me di un putazo.
No se preocupen: nadie vio.
Reanudaré el blog mañana. Ahorita nomás no traigo ganas.
Saludos a mis lectores y besos a mis lectoras.

lunes, 22 de diciembre de 2008

De por qué no voy a desearles una feliz Navidad


No me gusta la Navidad.
Me parece tonto que cada año las familias mexicanas, y todas aquellas que creen que Jesucristo nació un 25 de diciembre (aunque la ciencia nos ha dicho que en realidad fue por abril, o algo así) tengan que verse obligadas a convivir. El veinticinco de diciembre es solamente un día más, una página del calendario, otro giro del planeta; ningún día se vuelve especial solamente porque un grupo de personas ha dicho durante años que lo es.
Y sin embargo...
La Navidad es una excusa para descansar, comer y ¿por qué no?, hasta beber. Supongo que, a pesar de todas las horribles características que esa fecha alberga en su seno, hay personas que la pasan bien y disfrutan de la compañía de sus familiares. Ni modo; hay gente loca en este mundo horrible.
Dicho todo eso, no pienso desearle una feliz Navidad a nadie. No me gusta; me parece una hipocresía mundial celebrar algo a pesar de no tener una razón verdadera para celebrar. Que yo sepa, la Navidad no ha hecho de este planeta un lugar mejor.
Mis consejos navideños: no maten a nadie, no roben, no falsifiquen nada, no engañen, no violen, no embaracen a nadie que no sea su pareja formal, no golpeen a su prójimo ni a sus mascotas, en especial a sus mascotas, y lo más importante de todo: no mueran.
Si mueren, se perderán de toda la diversión que traerá consigo el año entrante.
Yo me despido por un rato, pero prometo volver para el 26 o 27 de diciembre con más sorpresas, diversión y esas pendejadas.
Cambio y fuera.
(Diablos, siempre quise escribir eso.)

domingo, 21 de diciembre de 2008

De los héroes de acción y sus enseñanzas


Hace tiempo me compré uno de los libros más chingones que yo haya visto en toda mi vida: el Manual del Héroe de Acción. La verdad, yo ya sabía cómo ser un héroe de acción; digo, no por nada soy uno de ellos..., pero... er..., quería saber si se estaba difundiendo correctamente nuestra palabra.
Sí, eso es.
En fin...
Cuando lo compré, sentí tanta emoción que no pude evitar sentirme bien pinche ñoño. El libro en una chingonería, pero no por eso logré sentirme mejor; después de todo acababa de comprar un libro que te dice cómo sobrevivir en prisión si eres injustamente encarcelado y cómo utilizar el truco mental jedi. El manual se divide en cinco capítulos:
1) Habilidades de chico bueno,
2) Habilidades amatorias,
3) Habilidades paranormales,
4) Habilidades de pelea,
y
5) Habilidades de escape.
Lo peor de todo, es que el libro está escrito por expertos y es completamente serio, incluso el cápítulo de las habilidades paranormales. En honor a la verdad, hay partes que sí son harto útiles en la vida cotidiana de cualquier hombre que se respete.
Recomiendo el Manual del Héroe de Acción a todas las personas que han soñado convertirse en James Bond, Indiana Jones o El Zorro.
La neta sí está bien bueno.

sábado, 20 de diciembre de 2008

De los barberos pasados de lanza y de los pasteles de carne de dudosa procedencia


Fui a ver Sweeney Todd: The Demon Barber of Fleet Street en compañía de nomeacuerdoquién, en la tarde de nomeacuerdocuándo. El chiste es que me gustó un chingo por un pequeño detalle: era el primer musical que no tenía la más mínima intención de parecer bello. La primera canción, No Place Like London, habla de una sociedad carente de moral que disfraza sus ignominias con máscaras de pudor. Una tras otra, las canciones del musical compuesto por el genial Stephen Sondheim van alcanzando más crudeza, hasta llegar a My Friends.
Dios mío, ¡qué chingona canción es My Friends! Esa pieza es novela negra pura, pues trata de un hombre que le habla a sus navajas con un amor mayor que aquél que dedicaría a su esposa muerta o a su hija desaparecida. ST:TDBOFS es la historia de un hombre común y corriente cuya vida se vuelve un infierno y lo tortura hasta convertirlo en un monstruo obsesionado. Eso es arte, señores, eso es arte.

Prefiero el musical que la película, en parte porque es más rudo, y en parte porque la versión de Tim Burton elimina algunas secuencias maravillosas, como una en que el juez Turpin tiene un orgasmo simplemente viendo a Johanna por el agujero que hizo en la pared de su cuarto. Los Todds de los musicales, obviamente cantan mejor que Johnny Depp, pero éste actúa mejor que todos los anteriores, así que queda más o menos compensado. Todas las señoras Lovett son buenas, pero prefiero a Helena Bonham Carter porque sabe mentenerse en el papel y cantar decentemente... Bueno, eso y porque ella me gusta mucho por alguna razón que no acabo de comprender.

En fin, si eres una de esas personas que no fueron a ver Sweeney Todd nomás porque se trata de un musical, piénsalo dos veces; después de todo, es el musical de un asesino en serie, ¿no?

Eso vale algo.

jueves, 18 de diciembre de 2008

De Temporada de patos o Del pendejo de Dieter que se deja convencer fácilmente


No sé cómo, pero Chunga me convenció de ver Temporada de patos en DVD. Dijo que un amigo suyo, "conocedor de arte," se la había recomendado mucho. Después de quince minutos de "Ándale, Dieter, vamos a verla," yo accedí, porque la verdad, me infundió un poco de curiosidad.
No estoy exagerando al decirles que, a los cinco minutos, yo ya estaba rogando a Dios que mandara un rayo directamente a mi aparato reproductor (a mi aparato reproductor de DVD, no a mi aparato reproductor). La película es nefasta. Los primeros cinco minutos son una serie de tomas sumamente raras y pendejas y carentes de sentido: la calle, el semáforo, el edificio, la puerta, el lavamanos goteando... Mamadas así. Ah, y por cierto, todo es en blanco y negro, seguramente porque el pendejo del director pensó que así sería más "artístico."
La historia comienza cuando dos chavitos se quedan solos en un departamento de Tlatelolco, se ponen a jugar Halo y piden una pizza. Llega una vecina porque quiere que el chavito que vive ahí la deje hornear un pastel o una pendejada así. Entonces, se va la luz y los chavitos y la chica se quedan como pendejos sin saber qué hacer. Y eso es la mitad de la película.
Luego, llega el repartidor de pizza y los chavitos no se la quieren pagar porque llegó tarde. Cuando llega la luz, se ponen a jugar Halo para decidir si la pizza se paga o no. ¿Esa mamada qué? Luego, se vuelve a ir la luz y ocurren más pendejadas. Escuchamos la historia de la patética vida del repartidor, la vecina se quiere tirar a uno de los chavitos, se comen un pastel de mota y pendejadas así, porque, después de todo, es una película mexicana.
El título de la película viene de un cuadro que cuelga en una de las parades del deparmento, el cual muestra una bandada de patos volando sobre un lago. Según el cineasta pendejo ése que ni merece tener su nombre en mi blog, representa la libertad anhelada por la bola de putos que tiene como personajes.
No pinches mames...
Cuando la mierda esa terminó, le dije a Chunga hasta de qué se iba a morir. Lo mandé al diablo y me puse a ver una película de verdad: No Country For Old Men, dirigida por los hermanos Coen, que esos sí son unos chingones. Rápidamente pude sentir como la mierda de Temporada de patos comenzaba a salir de mi sistema y me quedé más tranquilo.
No vean Temporada de patos. Por favor. Si conocen a alguien que la haya visto, denle una putiza; si conocen a alguien que la haya visto y además le haya gustado, mátenlo.
Le harán un bien a la humanidad.

Lo peor de todo esto es lo siguiente: esa mamada de pseudopelícula de mierda ganó un chingo de premios. No hay derecho. No hay que ser.

Chunga Strikes Back

Estaba yo todo emocionado, con ganas de presumir mi nueva playera, cuando llegó Chunga a mi casa. Entonces, subo a mi guardarropa, saco mi playera y voy con ella hasta mi amigo.
—Mira, Chunga, mi nueva adquisición. ¿A poco no está pocamadre? —le dije, mientras le mostraba una playera con ésta imagen:

Y Chunga, todo emocionado, me dice:
—Ah, ¡The Doors!
Verídico, damas y caballeros. Sólo en México.

miércoles, 17 de diciembre de 2008

De los amigos que son involuntariamente cagados y otras fortunas de la vida

Estaba yo con mi cuate al que llamamos Chunga, cuando se me ocurrió poner un disco de Janis Joplin. Después de un rato, cuando llegamos a la canción Summertime, le pregunto a Chunga:
—¿Qué pedo, Chunga, sí te está latiendo Janis Joplin?
—Más o menos —me responde él—. Ya le había escuchado algunas cosas, pero nunca me convenció completamente.
—Oh.
Entonces, me quedé callado, porque la respuesta de Chunga me sorprendió; no creí que mi cuate supiera algo de lo que viene siendo el rock, y mucho menos de lo que viene siendo el blues, sobre todo porque a él le gusta el pop romántico barato.
Entonces, rompiendo el silencio que yo aproveché para comenzar a generar un poco de admiración por él, dijo:
—Janis Joplin es negro, ¿no?
Y no me fui de culo nomás porque estaba sentado.
Y aquí, lo que nadie quiere ver: Janis desnuda

Y aquí, algo peor: Chunga himself, a la última moda del sostén de cocos en la cabeza. Foto real.


martes, 16 de diciembre de 2008

Sobre el podcast de Dieter y el Nuevo podcast de Dieter

He aquí el legendario y estúpido primer podcast que, junto con mis amigos, sacamos al aire hace un chingo de tiempo, como un año o algo así. No estuvo tan mal, pero solamente porque estábamos medianamente inspirados y teníamos a todo el... er..., bueno..., ¿equipo creativo? reunido. Si todo esto sale más o menos, seguramente sacaremos más podcasts. Lamentamos que no haya segunda parte del podcast que aquí ponemos, y lamentamos mucho más la mala calidad del audio y los horribles chistes... Pero, después de todo, en ese entonces éramos jóvenes, delgados, hermosos, y estábamos llenos de anhelos y esperanzas.
O algo así.
Bueno, disfrutad.
O algo así.

>

lunes, 15 de diciembre de 2008

Del idiota del soldado Ryan y su película, y del libro de la misma, que está bien bueno

¿Quién no vio Saving Private Ryan? Quien no la haya visto todavía, debería dejar de leer mis mamadas e ir a rentarla o, de perdida, ir a comprarla piratona. Saving Private Ryan es una de esas películas que marcan la diferencia. Recuerdo que cuando fui a verla al cine, la secuencia del desembarco en las playas de Normandía se me hizo pendejamente violenta. No digo que yo sea uno de esos güeyes que no le gusta ver un poco de sangre en pantalla, pero lo que vi ese día estaba muy cabrón. Muy, muy, muy, muy, muy pinche cabrón. Fueron más de veinte minutos de violencia innecesaria, sangre, explosiones, extremidades volando, balas perdidas y nazis culeros. Estaba a punto de hablarle a Spielberg para quejarme, cuando recordé: "Pendejo..., así son todas las guerras... Excepto tal vez por los nazis culeros." Entonces decidí que lo más inteligente sería permanecer en mi butaca y chentarme el resto de la película, porque para eso había pagado mi boleto. Cuando la proyección terminó, me di cuenta que, a pesar de ser fan del cine bélico, ésta fue la primera película de guerra que había visto. Spielberg decidió no andarse con mamadas y mostrar imágenes lo más cercanas a la realidad del campo de batalla. Y la realidad duele, damas y caballeros, duele tanto que vi a personas salirse de la sala y murmurar cosas sobre lo sangriento y sobre el mal gusto. No es de mal gusto una película de guerra que muestra soldados en pedazos, lo que en verdad resulta de mal gusto es la guerra, que genera soldados en pedazos. Me pareció una gran decisión que el director no escatimara en escenas sangrientas, porque solamente así se puede decir a la gente: "Pendejos, eso es lo que le pasa a sus hijos cuando van a la guerra a hacerse los héroes por pendejadas."
La película no sólo se enfoca en estos aspectos de brutalidad, sino que dedica varios momentos al compañerismo, al deber y a muchas otras cosas, pero supongo que es mejor que lo descubran por ustedes mismos, una vez más.
Salí del cine con una sensación extraña en la barriga. Al principio pensé que era culpa del exceso de chile en las palomitas, pero luego admití que fue la película, sobre todo la secuencia de los puentes... o quizá la escena de la muerte de Wade, el médico, aunque nunca supe bien. Total, conseguí la película en cuanto estuvo a la venta y volví a verla.
Sentí lo pinche mismo.
Un filme que puede hacer eso varias veces seguidas es digno de alabanza, por eso, hoy escribo sobre Saving Private Ryan.
Por cierto, encontré la novela basada en el guión, escrita por un tal Max Allan Collins. Es una novela harto recomendable y bellísima. A mi me pareció más llegadora que la película misma, pero es solamente mi opinión. Chéquenla... Lo único malo es que solamente se consigue con traducción española.
Ni modo. Nadie es perfecto.
Sólo Spielberg, mírenlo:

domingo, 14 de diciembre de 2008

Grandes personajes: Sherlock Holmes

Nadie pudo negar la habilidad de Conan Doyle blandiendo la pluma; sus fascinantes historias y la deliciosa narración de sus escritos lo convierten en el favorito de muchos. Ganó el título de sir gracias a sus obras La guerra de los Bóer y La guerra en Suráfrica, escritas a su regreso a Inglaterra después de servir como médico militar durante la guerra de los bóers. A éstos trabajos les siguieron muchos otros, sumamente buenos y dignos de explorar. Pero no somos completamente francos si intentamos evadir dar la mayor parte del crédito al personaje que impulsó la carrera literaria de Doyle más allá de las estrellas... más allá del tiempo: Mr. Sherlock Holmes.
El detective que alguna vez habitó el 221-B de Baker Street brilla en el salón de la fama de la literatura universal junto con su inseparable compañero, el doctor Watson. Impulsados por el ingenio de su creador, ambos personajes penetran en el mundo criminal de la ciudad de Londres con la intención de poner tras las rejas a los criminales que vale la pena aprehender. Valiéndose de métodos deductivos innovadores para su época, Holmes demuestra, algunas veces de forma bastante arrogante, su superioridad entre los oficiales de policía y los detectives de Scotland Yard, sorprendiendo a propios y ajenos con una leve manifestación de sus conocimientos de vez en cuando. A mi parecer, Sherlock es el personaje más increíble al que la literatura haya dado vida.
Personalmente he disfrutado de las varias novelas de Conan Doyle con singular regocijo, pues es característico de la época victoriana plasmar en las varias hojas que componen una obra literaria el predominio intelectual que precedió a la Gran Guerra, sin olvidar, por supuesto, aquel maravilloso toque que los personajes aportan en un intento por hacer de la lectura un momento ameno e inolvidable.
Y verdaderamente, lo lograron.
Después de la muerte de Holmes a manos del profesor Moriarty, la insistencia de los seguidores obligaron al autor a revivirlo; matar al hombre más querido de Inglaterra en ese tiempo fue, sin duda, un error imperdonable. Reticente, Doyle da a conocer algunas aventuras del detective en un período cronológicamente anterior a su muerte, hasta que, finalmente, convencido de haber errado y abrumado por las quejas, decide volverlo a la vida de modo poco convincente. Pero al fin, había vuelto.
Mostrando más respeto por su creación, Conan Doyle continúa con su oficio de escritor sin olvidarse de dar trabajo a Sherlock periódicamente. Es aquí cuando el escritor comienza a elaborar novelas y narraciones históricas que son acogidas de buena gana por críticos y admiradores.
Doyle escribe en 1924 El Archivo de Sherlock Holmes, última de sus aventuras juntos, pues en 1930 moría en Crowborough, el 7 de julio.
Fue precisamente sir Arthur Conan Doyle quien, con destreza incomparable en el manejo de la narración, me influye a mí, colocándome en el camino académico que sigo ahora. Para todos aquellos quienes conocen su trabajo, las ciencias de la deducción e investigación son, y seguirán siendo, algo elemental.

Del teatro de ciencia ficción y otros conflictos

Un amigo mío que tiene la mano metida en eso de la cultura fue hasta a mí y me dijo que tenía la posibilidad de conseguirle un teatro y darle presupuesto a cualquiera capaz de convencerlo de montar una obra de teatro. Le pregunté que cuáles serían sus exigencias con aquél que deseara pedirle su apoyo para poner la obra, y me dijo que tendría que ser una idea innovadora, chingona y que no necesitara de mucho presupuesto. Entonces le dije: "¡No mames, yo puedo darte eso!" Y entonces, me dio la oportunidad de escribir y dirigir una obra de ciencia ficción, que posiblemente se ponga en el Teatro de la Juventud o algo así. Lo mejor es que tengo una idea no muy desastroza y hasta un posible elenco, formado por amigos de la carrera de Literatura Dramática y Teatro.
Espero no cagarla otra vez.
Va estar bien chingón.

sábado, 13 de diciembre de 2008

Y la rola de hoy es: Fly Me To The Moon

Fly me to the moon es una de esas canciones que a güevo pones cuando estás enamorado o, al menos, crees estarlo. Fue escrita por Bart Howard en 1954, y en ese entonces, se llamaba In Other Words. Años después, se le cambió el nombre debido a que la gente la había hecho popular por su primera estrofa. La canción ha sido interpretada por chingos de cantantes, como Tony Bennett, Paul Anka, Shirley Bassey, Nat King Cole, Perry Como, Bobby Darin, Doris Day y varios más. Sin embargo, el hombre que la hizo verdaderamente reconocida fue Frank Sinatra, quien le agregó su particular y cínico estilo. Fly me to the moon es verdaderamente grande, ya que ha sobrevivido al paso de los años y aún hace suspirar a los chavos.
Yo brindo por ella.

Fly me to the moon
Let me play among those stars
Let me see what spring is like
On jupiter and mars
In other words, hold my hand
In other words, baby kiss me
Fill my heart with song
Let me sing for ever more
You are all I long for
All I worship and adore
In other words, please be true
In other words, I love you

Chingón.

viernes, 12 de diciembre de 2008

And here we... go!

Recuerdo perfectamente ese 18 de julio del año 2008, fecha en que The Dark Knight se estrenó en cines a nivel mundial. Fui, a güevo, con todo el entusiasmo del mundo y con mi playerita oficial de la película. Una vez adentro del cine, tuve que esperar una horrible media hora, en una fila llena de chicos fresas que nomás decían puras pendejadas, y para pasar el rato, fui a la dulcería y me compré un vasito de Batman y la gorrita de la película, que, no es por nada, está bien padre. Bueno, en fin, cuando entramos a la sala, pasaron otros veinte minutos de trailers y de comerciales, chingao...
Entonces, la sala se oscureció. La pantalla se volvió azul mientras se escuchaba una larga nota de violín eléctrico: el tema de Joker.
Ver esa película me emocionó mucho. Hacía bastante tiempo que no esperaba una película con tanta ansia, pero ésta la esperé, día a día, desde que la WB anunció que sí iba a sacar la secuela de Batman Begins. Fue una función apasionante; de repente, los chicos que tanto me habían irritado en la fila, se volvieron casi mis amigos, mientras gritábamos cosas como: "Ah, ¡qué chingón!" ¡Ah, no mames!" "Pinche Nolan... ¡se la rifó!" y así. Me pareció una película espectacular, maravillosa, tremendamente bien realizada, con diálogos fluidos y orgasmeantes. Salí de la sala con cara de poder morir feliz.
Ya he visto la película como diez veces, y mi opinión cambió bastante.
The Dark Knight es una película llena de errores, con secuencias innecesarias, diálogos más o menos buenos y un Batman que dan ganas de poner en el retrete y tirar de la cadena. Hay cosas imperdonables en el filme, como el hecho de que Batman hiciera trampa para atrapar a Joker, o que en la secuencia del penthouse, el detective enmascarado dejara ir al payaso sin intentar mover un dedo para detenerlo. Eso entre muchas otras cosas.
No obstante, TDK es una bella sorpresa, debo admitirlo. Hay secuencias en las que simplemente no puedes alejar los ojos de la pantalla. Harvey Dent está maravilloso, y te encariñas con el personaje inmediatamente; yo sí salí de la sala aplaudiendo a Aaron Eckhart. Rachel Dawes mejoró bastante, sobre todo porque ya no es la pendeja de Katie Holmes. Lucius Fox, sorprendente; no te imaginas a un técnico mejor para Batsy: Morgan Freeman actúa bien, como siempre, y te deja un gran sabor de boca, sobre todo por la mezcla de serenidad y comicidad que otorga al personaje. Michael Cane como Alfred es reconfortante, acogedor; es la figura paterna que muchos deseamos haber tenido, pero nomás nos la pelamos. Gary Oldman como James Gordon está en lo suyo, no falla ni decepciona; hasta sientes confianza en el personaje que antes era solamente una excusa para que apareciera Batman.
Y Heath Ledger como The Joker... Bueno, ese es pedo aparte.
Cuando Joker aparece en la reunión de Mafiosos, empieza la película. "Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja-a-ajá..." dice él, y el mundo se detiene. Ledger dio vida a un hombre aterrador, demente y divertido; un sujeto que podría matar a cien personas frente a tus ojos y aún así ganarse tu afecto. La actuación, ciertamente es memorable, y la mejor que vimos en el año, después de todo: ¿hace cuánto que un personaje de cómic es llevado al cine con tanto éxito? Es una cosa bastante difícil, cabe decir. El personaje se lleva la película, y todos los momentos memorables son a causa de él. Heath Ledger se fue como los grandes, y es una verdadera lástima que no haya podido disfrutar su éxito.
Tal vez lo mejor de TDK es que no resultó ser una película con final feliz ni llena de ánimo, todo lo contrario: es una historia triste y, paradójicamente, más cercana a la realidad que muchas otras. Te recuerda que el mundo no es un lugar bonito, sino una cubeta llena de agua sucia en la que solamente puedes esperar a ahogarte, o a que otro te ahogue mientras intenta salvarse inútilmente. La historia de Batman cala profundo en el corazón de mucha gente porque trata sobre un grupo de personas que tuvieron un mal día y reaccionaron tomando la mejor decisión posible, la decisión que no muchos se atreven a tomar: abrazar la locura. Todo esto ocurre en una ciudad ficticia llamada Gotham City. Bob Kane, el creador de Batman, decidió que lo mejor sería no poner a su personaje en una ciudad real, como Nueva York o Chicago, sino crear una nueva, para que los lectores, sin importar dónde se encontraran, pudieran sentirse más cercanos a la historia, porque Gotham bien podría ser cualquier ciudad, incluso la nuestra... Y eso resulta doblemente aterrador.
Por eso y muchas cosas más, me compré el DVD de dos discos de TDK. Vale mucho la pena hacerse de una copia, sobre todo porque el disco dos incluye bastante de la campaña viral y las escenas que fueron filmadas en formato IMAX. Aunque no es la mejor película del mundo, TDK debe estar entre las posesiones de los amantes del cine, sobre todo porque es un gran historia e incluye a los dos grandes personajes que encabezan la lista del Salón de la Fama de los Personajes Ficticios.
Es más, la voy a ver otra vez, nomás de puro coraje.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

De los amigos que no han tenido sexo y otras cosas para burlarse

Estaba yo en lo que viene siendo la chamba, cuando mi compañero, un tipo al que llamamos Papas, me dijo, sin razón alguna, lo que me pareció la pendejada más grande que he escuchado en mi vida:
—Yo creo que el sexo está sobrevalorado.
Bueno, cuando recobró la conciencia, en el hospital, le expliqué que el sexo era lo más hermoso del mundo después del internet y del plástico protector con burbujitas de aire. Entonces, con su infinita pero improvisada sabiduría a base de conjeturas, Papas me dijo:
—¡Vamos! No puede ser mejor que un videojuego o la autosatisfacción.
Esta vez me contuve, porque el muchacho aún no cicatrizaba bien y porque también estaba desayunando su pan y su leche, y la verdad jode mucho que te agarren a putazos cuando estás desayunando. Entonces le dije a mi compañero que eso sólo podría decirlo un virgen.
—Papas, ¿eres virgen?
—Sí.
—Ay, pinche Papas... El sexo es mejor que todo.
Y con un bigote de leche dibujado sobre la boca, se atrevió a preguntar:
—¿Es mejor que la leche?
Y pues, en el funeral de Papas, expliqué a todos la burrada que había dicho y todos me disculparon.

FIN

martes, 9 de diciembre de 2008

De los detectives mexicanos que piensan en cómo resolver sus misterios mientras se sacan la mugre de las uñas con un boleto del Metro

Me compré el primer libro de la serie del detective Héctor Belascoarán Shayne. Belascoarán es el detective mexicano por excelencia: se lastima los güevos con la mira de su revólver, se saca la mugre de las uñas con un boleto del metro, consiguió su licencia de detective por correspondencia y le valen verga los análisis de huellas digitales, porque confía más en su instinto que en la ciencia, sobre todo porque le da güeva la ciencia. El primer libro de la serie se llama Días de combate, en el que el detective trata de resolver el misterio de un estrangulador de mujeres que deja notas sobre sus víctimas, firmadas con el nombre de Cerevro.
La novela es sumamente bella y entretenida, sobre todo para los mexicanos, que podrán sentirse identificados con los personajes que aparecen en el relato, el cual se lleva a cabo en la ciudad de México. La historia avanza rápido, a pesar de detenerse mucho en cosas que resultan irrelevantes para la historia, por ejemplo, el fugaz noviazgo del detective y el problema de su ex mujer. Hay personajes bellísimos, sobre todo, los compañeros del autoproclamado detective independiente, quienes, además de ser albureros y valemadres, agruegan un toque de realidad a una situación que parece ajena a la vida diaria del capitalino.
Recomiendo mucho esta novela, en especial porque fue escrita por un hombre al que considero uno de los mejores escritores mexicanos: Paco Ignacio Taibo II, quien también escribió las biografías del Che Guevara y de Pancho Villa.
Por cierto, me compré The Dark Knight en DVD, pero de eso hablo luego, porque ya traigo güeva.

domingo, 7 de diciembre de 2008

Y la rola de hoy es: Billie Jean

Canción escrita por el pinche Maicol Yacson y liberada allá por el lejano año de 1983. La canción es maravillosa y es considerada como una de las mejores de todos los tiempos. Sencilla y pegadora, Billie Jean es una de esas rolas que se llevan a todos lados en el reproductor portátil.


She was more like a beauty queen from a movie scene
I said don't mind, but what do you mean I am the one
Who will dance on the floor in the round
She said I am the one, who will dance on the floor in the round
She told me her name was Billie Jean, as she caused a scene
Then every head turned with eyes that dreamed of being the one
Who will dance on the floor in the round

People always told me be careful of what you do
And don't go around breaking young girls' hearts
And mother always told me be careful of who you love
And be careful of what you do 'cause the lie becomes the truth

Billie Jean is not my lover
She's just a girl who claims that I am the one
But the kid is not my son
She says I am the one, but the kid is not my son

For forty days and for forty nights
The law was on her side
But who can stand when she's in demand
Her schemes and plans
'Cause we danced on the floor in the round
So take my strong advice, just remember to always think twice
(Do think twice)

She told my baby we'd danced till three, then she looked at me
Then showed a photo my baby cried his eyes were like mine (oh, no!)
'Cause we danced on the floor in the round, baby

People always told me be careful of what you do
And don't go around breaking young girls' hearts
She came and stood right by me
Then the smell of sweet perfume
This happened much too soon
She called me to her room

Billie Jean is not my lover
She's just a girl who claims that I am the one
But the kid is not my son

Billie Jean is not my lover0
She's just a girl who claims that I am the one
But the kid is not my son
She says I am the one, but the kid is not my son

She says I am the one, but the kid is not my son
Billie Jean is not my lover
She's just a girl who claims that I am the one
But the kid is not my son
She says I am the one, but the kid is not my son

She says I am the one, but the kid is not my son
She says I am the one

Billie Jean is not my lover
Billie Jean is not my lover
Billie Jean is not my lover
Billie Jean is not my lover

Billie Jean is not my lover

Billie Jean is
Billie Jean is
Billie Jean is

Not my lover
Not my lover
Not my lover
Not my lover

Billie Jean is not my lover (she is just a girl)
Billie Jean is not my lover (she is just a girl)
Billie Jean is not my lover (she is just a girl)
Billie Jean is not my lover (she is just a girl)

Billie Jean is
Billie Jean is
Billie Jean is not my lover
Billie Jean is not my lover

Billie Jean is
Billie Jean is
Billie Jean is not my lover
Billie Jean is not my lover

Billie Jean is
Billie Jean is

sábado, 6 de diciembre de 2008

La cosa que alguna vez fue Michael Jackson y su Thriller

No soy fan del pop. De hecho, la música pop tiene la maravillosa cualidad de irritarme mucho. Tal vez se trate de su simplicidad, del poco empeño que sus autores ponen siempre en ella, pues les parece más importante vender su producto que presentar un buen trabajo.
Curiosamente, escribo esto mientras escucho el álbum Thriller, de Michael Jackson.
Cuando era niño, a mí me encantaba el Rey del Pop. Recuerdo que una de mis fantasías no-sexuales era ir a uno de sus conciertos y wasawasear sus canciones, porque a esa edad no entendía ni madres del inglés. Fui fan de él hasta que empezó con sus delirios de grandeza y sus intentos de salvar al mundo. Ahí fue cuando valió madre.
Ah, sí; y cuando adoptó el extraño e ilegal hábito de acostarse con niños.
En fin, hubo un momento del siglo pasado en que Jackson fue lo más grande de mundo; salía a cada momento en la televisión y sus canciones se repetían sin cesar en la radio. A mi poco ortodoxo parecer, su mejor disco es Thriller. Es una belleza, punto. Todos los tracks son disfrutables, y tres de ellos hicieron historia: Thriller, Beat It y Billie Jean. El primero se volvió inolvidable gracias al video y su maravillosa coreografía; el segundo es, como dijo alguien a quien yo respeto mucho, "el encuentro más afortunado ente el rock y el pop"; y el tercero... Bueno, el tercero es una de mis canciones favoritas de todos los tiempos.
En este mismo momento mi grabadora escupe las primeras notas de Billie Jean; son suaves, elegantes y pegadoras.
Y yo simplemente no puedo evitar llevar el ritmo con el pie.

viernes, 5 de diciembre de 2008

The Godfather

Hace como una semana, una amigo me pidio prestado el libro El Padrino, de Mario Puzo. Según él, es todo un conocedor del pedo del arte y la literatura, así que me escandalicé cuando admitió no haber leído ese libro tan importante y necesario para el amante de la lectura. Lo maldije, y luego, le presté el libro. Como mi cuate ni siquiera había visto la película, el libro le pareció doblemente sorprendente, y cómo no: la obra de Puzo es tan grande y está tan bien hecha que no pudieron cagarla ni cuando la adaptaron al cine. Todos aquellos que han visto la película de Francis Ford Coppola y quedado enamorados de la fuerza de las imágenes y las situaciones, en verdad deberían agradecerle al escritor, y no al director. La verdad es que el largometraje está tal y como dice el libro, y es por eso que alcanzó tal relevancia. Si el libro dice: "Don Corleone se sentó en su escritorio, meditabundo, y rascó su barbilla," Marlon Brando se sienta en el escritorio, pone cara de estar meditando y se rasca la barbilla. Si los fans de la película se tomaran algunos momentos para leer la novela, quedarían encantados al saber lo que hay en los huecos que dejó Coppola. Por ejemplo, ¿qué diablos estába pensando Michael Corleone antes de dispararle a McCluskey y a Sollozzo en el restaurante? ¿Cómo es que el Padrino, Don Corleone, llegó a ser un hombre tan importante en Nueva York? ¿Quién era el consigliere de la Familia antes que el buen Tom Hagen?
Todo eso viene en el libro.
Hay un gran momento en el libro, uno que me hace llorar como niña cada vez que lo leo. Se supone que Don Corleone va con su familia al hospital, a visitar al moribundo Genco Abbandando, quien era en ese entonces el consigliere de la Familia. Abbandando está sufriendo a causa del cáncer terminal que por meses lo ha tumbado en cama; está a punto de morir, y pide al doctor que deje pasar al Don a la habitación. Cuando el consejero ve al Padrino, le pide algo imposible, alentado por el delirio provocado por el dolor y la fiebre. Le dice:
"Padrino, Padrino, sálvame de la muerte, te lo ruego. La carne me está quemando, y siento que los gusanos me están comiendo el cerebro. Cúrame, Padrino, sé que tienes el poder para hacerlo; seca las lágrimas de mi esposa. De niños, en Corleone, jugábamos juntos, y ahora, ¿vas a dejarme morir? ¿No te das cuenta que temo ir al infierno por todos los pecados que he cometido?"
En la madre. Eso es hermoso. Cuando el Don lo convence de que no puede hacer eso, Genco agrega:
"Padrino, quédate junto a mí y ayúdame a encontrarme con la Muerte. Quizá, si te ve a mi lado, se asustará y me dejará en paz. O tal vez puedas convencerla, moviendo algunos hilos, ¿eh?"
Veeeeeeeeeeergaaaaaaaaaa... Eso ocurre en el principio del libro, cuando ni siquiera ha arrancado la historia; solamente es una bellísima manera de mostrarte el poder del Padrino, el gran Don Corleone. El autor te dice que la gente alrededor de él lo cree capaz, incluso, de ahuyentar a la Muerte con su presencia.
Y eso, no tiene precio.
Recomiendo leer El Padrino. Lo recomiendo bien cabrón. Se dice que toda la sabiduría que un hombre de verdad necesita, se encuentra en ese libro.
Yo creo que es cierto.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Sobre el porno y otras bellezas

El otro día una vieja amiga mía entró a mi Hi5 y se puso a ver las fotos que subí. Obviamente se topó con la foto que pusé en mi perfil aquí, donde estoy agarrándole los pechos desnudos a una mujer. Mi amiga es una feminista loca, y como tal, me reprochó por haber subido la foto, y más que eso, por habérmela tomado. Cuando le expliqué que la chica de la foto se hace llamar Alektra Blue y es una estrella porno, pegó el grito en el cielo. Me dejó un extenso comentario en el que explica por qué la pornografía es mala y dañina para las ya de por sí retorcidas y pequeñas mentes de los hombres. Según ella, la exposición continua al material xxx potencia en los varones el deseo de poseer a las mujeres, aún sin su consentimiento, y además, atrofia su precepción respecto a la mujer, volviéndolas solamente "una vagina o unos pechos andantes."
Patrañas.
Yo veo porno. La verdad, no conozco a un solo hombre que no vea porno. Vemos porno, sí, lo vemos, y un chingo. Es apropiado mencionar en este momento que conozco a hombres que pasan gran parte de su tiempo viendo porno y no por eso tratan mal a las mujeres, al contrario; las tratan como reinas y se ofenden cuando algún pelado las llama "viejas." El porno no es malo. Es solamente una forma más de entretenimiento. Si yo subí mi foto con Alektra Blue a mi blog y a mi Hi5, no lo hice porque creo que me sube el status como macho, sino porque soy fan de esa mujer y me enorgullece que, en algún momento de mi vida, estuve a su lado y hablé con ella. Es una gran chica, además; mientras el fotógrafo preparaba la cámara que inmortalizaría uno de mis mejores momentos, ella me hizo plática, en español. Me dijo que había sido un día muy pesado y que las piernas le dolían. Por ese breve momento, ella dejó de ser una estrella porno y se convirtió en una mujer común y corriente, una chica de las que se sienta a tu lado en el autobús o camina en la misma dirección que tú cuando vas camino a casa. Cuando el fotógrafo dijo estar listo, ella tomó su pose y sonrió a la cámara.
Lo que ella hace es solamente un trabajo, una forma de ganarse la vida por el medio que le parece más fácil. ¿Qué hay de malo en eso?
Cuando todo pasó, me dio un beso de despedida y autografió uno de mis tantos sombreros, justo al lado de las rúbricas de Roxy Reynolds y Courtney Cummz. Valoro tanto ese maldito sombrero que no me lo he puesto desde ese día, por miedo a que algo lo pase.

No hay nada malo en el porno. Después de todo, cada cabeza es diferente y ve las cosas de distintas maneras. Si mi amiga tuviera razón, entonces deberían prohibir las películas de guerra porque los niños van a querer dispararle a alguien, o prohibir a los homosexuales ser homosexuales en la calle porque los niños van a andar por el mundo dando besos a los niños y las niñas dando besos a las niñas. Eso es simple, sencilla y llanamente, una mamada.
Yo amo el porno. Ya hasta me hice una playera con la foto que me tomaron con Alektra. También amo a esa mujer. Es una diosa. Se ha convertido en un amor platónico para mi. Y la respeto... De hecho, la repeto más que a la mayoría de las mujeres que conozco. La respeto porque es una gran mujer y le vale verga lo que piensen de ella, porque en el fondo, muchos sabemos que lo que hace no tiene nada de malo. Es más, será de las primeras en ir al Cielo por haber hecho felices a tantos hombres. Palabra.


miércoles, 3 de diciembre de 2008

Y la rola de hoy es: You Got The Silver


Esta joyita fue compuesta por Mick Jagger y Keith Richards allá por el año de 1969 y fue liberada en el disco Let It Bleed. Yo lloro cada vez que la oigo. Un hombre que no se haya sentido alguna vez como dice la canción, no es un hombre de verdad, y tiene un 97% de posibilidades de volverse gay.


Hey babe, what's in your eyes?
I saw them flashing like airplane lights.
You fill my cup, babe, that's for sure;
I must come back for a little more.
You got my heart, you got my soul;
You got the silver, you got the gold.
You got the diamonds from the mine,
Well that's all right; it'll buy some time.
Tell me, honey, what will I do
When I'm hungry, and thirsty too,
Feeling foolish, and that's for sure,
Just waiting here at your kitchen door?
Hey baby, what's in your eyes?
Is that the diamonds from the mine?
What's that laughing in your smile?
I don't care, no, I don't care.
Oh babe, you got my soul,
You got the silver, you got the gold.
It's just your love, just leave me blind,
I don't care, no, that's no big surprise.


¡Qué pinche chingón!

martes, 2 de diciembre de 2008

De los podcasts y otros pedos


Dos amigos míos me cayeron a la chamba. Los conozco desde que iba en la preparatoria, que, aunque no lo crean, no fue hace mucho tiempo. Me ayudaron a cerrar el changarro y nos fuimos caminando avenida Revolución hasta llegar a Barranca del Muerto. Durante el camino, Cuauhtémoc, uno de ellos, me dijo que estaría chingón hacer un podcast en el que nos burláramos de un güey que nos caga. Yo le dije que sí, porque ya antes habíamos incursionado en eso de los podcasts con resultados bastantes prometedores. Hubo un momento de nuestras vidas en que fuimos famosos y hasta fans tuvimos. ¡Ah, qué buenos tiempos! Nuestros teléfonos no dejaban de sonar y las chicas nos acosaban de maneras enfermizas y nos obligaban a tener sexo con ellas para ganarse una pequeña participación. Cinco hijos después, abandonamos el proyecto por razones bien absurdas. Ni modo.
Hoy intentaremos grabar otro podcast. Yo sé que va a quedar de la verga y que vamos a terminar viendo porno o películas de acción. Ahí yo les aviso si vale la pena checarlo. Yo sé que no.

lunes, 1 de diciembre de 2008

De por qué los Rolling Stones son una verga y otros cuentos


Me encanta la música instrumental. Es parte importante de mi vida desde que era muy pequeño, y la culpa es del pinche John Williams, el compositor ese que ha hecho la música de Jaws, E.T., Star Wars, Indiana Jones y otras películas pegadoras. Williams introdujo al cine una nueva forma de musicalización, con grandes orquestas y piezas musicales temáticas para diferentes personajes o situaciones. Su más grande logro, por supuesto, ha sido Star Wars. Los seis sondtracks de las películas son unas pinches joyas. En serio. No hay uno que no tenga una pieza que quieras aprender a tocar en algún instrumento formal. Todavía quiero interpretar el Princess Leia's Theme en un maldito violín y ponerme a llorar cuando acabe, ni hablar de tocar Across The Stars en piano, porque entonces me cago. Ese viejito, el tal Williams, es un chingón de chingones, y el día que su Dios se lo quiera llevar con él, yo voy a llorar como niña y me encerraré en mi cuarto con todos sus discos y unas cuantas cajas de pañuelos desechables. Mi luto será eterno.
Pasé muchos años de mi vida escuchando música clásica e instrumental, pero inevitablemente llegó el momento en que necesité algo más, algo diferente.
Algo en el fondo de mi pecho me dijo que era el rock.
Entonces, contacté a mi amigo Bruno y le pedí rock, porque él te maneja lo que viene siendo el rock, y me dijo: "Sí, no hay pedo, yo te paso algo". Entonces, se me vino a la mente el recuerdo de un grupo al que le quería echar el oído, pero no me acordaba cuál era. Como estaba escuchando las polkas de "Weird Al" Yankovic, llegué hasta una que se llama The Hot Rocks Polka, que está formada de puras rolas de los Rolling Stones. Esa pinche polka me encanta. Entonces, le dije a Bruno: "Oye, ¿tienes algo de los Stones?," y el me respondió: "Ah, sí. Tengo un disco de jits que te puedo pasar."
Así fue. Me lo pasó, lo oí, y todo valió pura madre.
El disco de llama Forty Licks, y es una recopilación de lo mejor de los Stones. El disco uno es orgásmico, desorbitante, insuperable, una verga. El disco dos está bieeeeeeeeen chido, pero sin lugar a dudas, pudieron meterle mejores rolas. Ni modo; lo mejor en esas situaciones es hacerte tu propio disco. Yo ya compré un chingo de discos de las Majestades Satánicas. Cada vez me gustan más. Soy bien fan. Soy bien pinche fan. Hasta me compré una playerita bien chévere con la lengüita esa. Rockea. Amo a los pinches Stones; aún viejitos se llevan de corbata a muchos chavos de ahora. Ojalá nunca se mueran.
Durante mi aprendizaje en el pedo del rock, he pasado ya por varios grupos. Me latió la onda esa de la guitarra eléctrica. Confió en ella y ya hasta hago a veces la guitarra de aire. Inevitable. Ni modo: el rock se ganó mi corazón. Los dioses me perdonen.

Pinches blogs, cómo me cagan


Por eso hago este, porque me cagan, porque los odio, porque son una mierda, porque casi todos están hechos por pendejines con las cabeza llena de aire, porque a mí me gusta escribir, porque no escribo tan mal, porque a veces sí tengo cosas interesantes que decir, porque tengo un chingo de tiempo sobrante, porque quería presumir mi foto del perfil, porque el nombre de mi blog está chingón, porque me gusta criticar, porque me gusta crear, porque me gusta creer, porque me encanta teclear la palabra "porque", porque me acabo de enterar que hay gente que sí lee los blogs de extraños, porque tengo un amigo que es una mierda y se consiguió fans con su blog, porque me yo les manejo lo que viene siendo la ciencia ficción y el género negro, porque Batman es un chingón, porque tenía curiosidad de hacer uno y porque se me hinchan las pelotas.
He dicho.